Los conductores con muchos años de experiencia y edad. Depende de cada compañía de seguros, pero es habitual que además del conductor o conductores que figuren en la póliza, también están cubiertos en caso de accidente aquellas personas que cumplan unos ciertos requisitos como la edad y antiguedad del carnet de conducir.
Los hijos también son aquellos individuos que pueden ponerse al volante del coche familiar. En éste caso la compañía del seguro debe conocer que éstas personas van a ser también conductores del vehículo, y constar al respecto como conductor principal o secundario.
Los conductores en caso de coches de alquiler. Es necesario que el conductor sea quien conste como tal en el contrato que se firma al inicio del alquiler. Si otras personas van a conducir el coche de alquiler hay que comunicarlo a la compañía para ampliar la cobertura del seguro. Cuantas más personas figuren como conductoras, más riesgo para las compañías aseguradoras, con lo que el precio de la póliza aumenta.
Los conductores esporádicos. Dependiendo de las cláusulas del contrato, el conductor esporádico puede estar o no cubierto. Hay aseguradoras que piden que el conductor esporádico sea mayor de una cierta edad, o que sea de mayor edad que el conductor habitual. Otras, piden que la antigüedad de su carnet sea de dos años o que se tenga el carnet de conducir desde hace más tiempo que el conductor principal. Así pues, es necesario leer minuciosamente los requisitos del contrato de la póliza que se tiene contratada.
Antes de ponerte al volante del coche, comprueba las condiciones de su seguro y en caso de tener dudas, ponte en contacto con tu Agente ALLIANZ para que te informe. Recuerda que la prevención al volante es muy importante.